Dicen las lenguas mágicas que algunas almas necesitan experimentar la muerte antes de vivir la vida, quizás por eso quisiste venir un año antes y te fuiste como un suspiro, en aquel momento quedé vacía, frágil e insignificante, pero tu hermano dejaba entrar luz en tanta oscuridad. Entonces, cuando la marea se calmó, te decidiste a venir, nos volviste a elegir.
A la madrugada me advertiste que el día sería hoy, naciste rápido y armando mucho revuelo, tus ojos se abrieron antes de dejar oír tu voz, te colocaron sobre mi con mi cuerpo aún desarmado, supiste alimentarte, supiste quienes éramos... y nosotros nos enamoramos.
Hoy hace un año que estás aquí: Bienvenida mi niña de la luz, has venido a acompañar a mi niño de cristal, ambos tienen ojos de cielo, ojitos de sol, ojitos de tempesta.
Feliçitats!
Love
mamá
